El liderazgo es el proceso por el cual la persona tiene la capacidad para influir y motivar a otras personas, es un proceso que se da en diferentes contextos y no necesariamente se debe tener un puesto de liderazgo en una empresa para ser un líder. Los líderes pueden transformar aspiraciones, ideales, motivaciones y valores de seguidores a través de la elevación del nivel de las necesidades como el sentido del logro o la autoestima.
De acuerdo con diversas investigaciones en el campo de las organizaciones, se ha encontrado que el liderazgo que potencializa lo bueno de las empresas y de los colaboradores a través de generar mayor bienestar en equipos y en los individuos es el liderazgo que mejores resultados tiene en cuanto a mejora de relaciones laborales, mejora de clima laboral, mayor productividad y mayor compromiso de las personas en la organización. Este tipo de liderazgo se le ha denominado Liderazgo Positivo y tiene sus raíces en el estudio científico.
El Liderazgo Positivo facilita un rendimiento superior de los individuos y grupos centrándose en las fortalezas y habilidades de estos enfocándose en los aspectos que llevan a una vida óptima.
Los líderes positivos:
Transforman lo negativo en oportunidades de aprendizaje y crecimiento.
Identifica lo que no funciona en la organización, pero se centra en aspectos positivos y que sí funcionan para poder enfocar esas cualidades y fortalezas hacia la resolución de problemas.
Promueven compasión, perdón y gratitud en sus equipos.
Conocen y aprovechan las fortalezas y habilidades de los colaboradores ayudándolos a desarrollar su potencial.
Llevan a cabo una retroalimentación sobre lo mejor de los colaboradores y su desarrollo hacia el futuro además de identificar mejoras, sin criticar o juzgar.
Utilizan una comunicación enfocada al apoyo y soporte del equipo y de las personas, son guías o mentores.
Asocian el trabajo con un propósito positivo para el personal, la organización y la sociedad.
Son auténticos y congruentes con sus valores y los valores de la organización.
Identifican los efectos a largo plazo más que los efectos a corto plazo.
Contribuyen a que haya un balance emocional positivo, es decir, que se generen más emociones positivas que negativas.
Son optimistas, confiables, considerados y generosos.
Es importante mencionar que para ser un líder exitoso antes es necesario desarrollarte de manera personal, conocer tus fortalezas particulares y habilidades, desarrollar tu inteligencia emocional, identificar tus valores y tu propósito ya que como dice Jack Welsh, ex CEO de General Electric "...cuando llegas a ser líder el éxito es todo sobre desarrollar a otros."
Referencias
Blanch, J., Gil, F., Antino, M. & Rodríguez-Muñoz, A. (2016). Modelos de liderazgo positivo: marco teórico y líneas de investigación. Papeles del Psicólogo, 37 (3), 170-176.